Política Rosa Guilló

21 diciembre 2006

Coacción y violencia para alcanzar la libertad

  • Puntos comunes entre el nacionalismo vasco y el irlandés

Los movimientos separatistas vasco e irlandés, en tanto que nacionalismos, tienen diversos puntos en común:

En primer lugar ambos disponen de un brazo político, el IRA con el Sinn Fein y ETA con Batasuna. Aunque las circunstancias de ambos partidos son distintas, puesto que el Sinn Fein es legal y cuenta con representación en el Parlamento Británico, Batasuna también lo fue en su momento e incluso, cuando se denominaba Esukal Herritarrok, llegó a formar gobierno con el PNV y Eusko Alkartasuna.

Otra similitud es el entorno político que rodea este movimiento. En ambos escenarios encontramos partidos nacionalistas moderados, PNV en el País Vasco y el Partido Social Demócrata Laborista (John Hume) en Irlanda, y partidos nacionalistas radicales, como los ya mencionados Batasuna y Sinn Fein (Gerry Adams). Asimismo, también hay partidos no nacionalistas moderados, como puede ser el PSE-PSOE en España y el Partido Unionista del Ulster (David Trimble) en Irlanda, y sectores no nacionalistas más radicales, como la corriente situada más a la derecha dentro del Partido Popular o el sacerdote católico irlandés Alec Reid.

Al igual que sucede en el actual proceso de negociación con la banda terrorista ETA en nuestro país, en Irlanda, en un primer momento, una de las exigencias para iniciar las negociaciones era el abandono de las armas. Finalmente, cuando Blair ganó las elecciones en 1997 los contactos con el Sinn Fein se iniciaron sin que ese aspecto llegara a consumarse. En España, nos encontramos todavía en la primera parte de la historia y no se sabe cuál va a ser su evolución, pero el punto de partida es el mismo.

Asimismo, las escisiones dentro de los grupos armados es otro de los aspectos que une a ambas bandas terroristas. Mientras el IRA demostró sus diferencias internas con el atentado de Omagh, perpetrado en medio del alto el fuego y que a punto estuvo de acabar con el proceso de paz, ETA demuestra esas desavenencias con acontecimientos como el ocurrido durante la celebración del Gudari Eguna (Día del Soldado Vasco), en el que tres encapuchados, dos de ellos armados, aseguraron que la lucha no era el pasado, sino el presente y el futuro, o los continuos altercados provocados por la kale borroka.

Y como punto de encuentro final, el momento presente, ya que ambos se hayan en un alto el fuego. Aunque el estado de ambos procesos está en dimensiones diferentes, bien es cierto que el terrorismo español es mucho más reciente que el irlandés, por lo que los tiempos también son distintos. En cualquier caso, en estos momentos las dos bandas armadas comparten ese estado.